El encargado de la dirección estratégica de la unión del tranvía en Barcelona, Pere Macias, ha condicionado una reforma "sostenible" de la avenida Diagonal al proyecto de conexión, ha asegurado este jueves en declaraciones a la prensa.

"Si se quiere una reforma sostenible el proyecto es el que se presentó este miércoles", en relación a la propuesta de protocolo de colaboración entre el Ayuntamiento y la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) para que el tranvía llegue de la plaza Glòries a Verdaguer.

"Sin tranvía se tiene que hacer otro proyecto", y ha insistido en que los estudios actuales no sirven para mantener un modelo de primacía del vehículo privado, y ha señalado que la demanda de algunos grupos de implantar la línea D30 por la Diagonal es una excusa para mantener la circulación de coches por la avenida.

Ha subrayado que el proyecto de urbanización del entorno de la red tranviaria está en fase de auditoria municipal, y que a partir de abril estará en disposición de ser aprobado siempre que haya el visto bueno del pleno del próximo 23 de marzo: "Está en juego un cambio muy revolucionario que hace posible una nueva movilidad urbana o mantener un modelo de primacía del coche".

Asimismo, ha considerado de "sentido común" realizar la unión del tranvía en dos etapas para evitar afectaciones mayores en un tramo de más de cuatro kilómetros, y ha defendido iniciar las obras por la zona de Glòries porque ya está en transformación y porque los barrios del Besòs necesitan mejorar su conexión con el centro de la ciudad, especialmente la parada de la L5 del Metro en Verdaguer.

El tramo prevé tres paradas: Monumental, Sicília y Verdaguer, y supondría una inversión de unos 98,4 millones de euros -que se suman a los dos millones que ha costado el estudio informativo y la redacción del proyecto-, y que se traduciría en un incremento de 2.499 metros cuadrados de carriles bici; 766 de zona verde y 13.539 de espacio para peatones.

Macias ha explicado a la prensa que el criterio general de la proyecto de extensión del tranvía es beneficiar a la nueva infraestructura, a los peatones y a los ciclistas, y ha destacado que este cambio de modelo se plasmará en la plaza Pablo Neruda, punto de encuentro entre la Diagonal y las calles Aragón y Sardenya, donde se encuentra la escuela Ramon Llull.

"Este punto nos da una imagen intolerable de Barcelona, ya que tiene 15 carriles de circulación", y ha afirmado que con la reurbanización se eliminarían por completo los de la Diagonal -se conservarían sólo los de Aragón-, por lo que se configurarían dos manzanas de la Diagonal sin tráfico, entre Sardenya y Lepant.

El director de Modelo Urbano de Barcelona, Ton Salvadó, ha asegurado que esta actuación supone la reparación de un "agravio histórico" en la zona, y ha añadido que, entre Lepant y Padilla, sólo habrá un carril limitado a 30 kilómetros por hora en dirección Besòs, y ha alegado que en esta zona de la Diagonal el volumen de tráfico es muy bajo.

Macias ha dicho que en el tramo entre la calle Girona y Lepant se eliminará la circulación de coches del tronco central, que se trasladará a los laterales, lo que permitirá ampliar las aceras, construir carriles bici bidireccionales de cuatro carriles y mantener los árboles de la avenida, mientras que entre Lepant y Glòries los carriles del tranvía se bifurcarán para respetar la configuración como rambla.

Asimismo, ha señalado que en la plaza de las Glòries se situará una parada de tranvía en la que se unirán las líneas del tranvía: "Hay convoyes que vendrán desde Verdaguer y llegarán a Glòries, algunos para continuar por la Diagonal y otros hacia Gran Vía", y ha detallado que se creará un servicio lanzadera desde la misma plaza hasta Ciutadella-Vila Olímpica, así como una área de intercambio con Metro, buses urbanos e interurbanos.