Una perdió un ojo y otro (menor), dos dedos. Los petardos han jugado más que una mala pasada a estas dos personas al entrar el año. El primer caso es el de una joven de 24 años que aún se encuentra ingresada en estado grave tras ser alcanzada por un petardo durante la Nochevieja, en Jerez de la Frontera (Cádiz). El segundo, el de un niño de cinco años natural de Lepe (Huelva) que fue trasladado al Hospital Virgen del Rocío de Sevilla donde fue intervenido tras perder dos dedos y las primeras falanges de otros dos mientras jugaba con un petardo en Año Nuevo. A raíz de estos casos, la asociación Por el Derecho al Descanso ha pedido la prohibición de la venta de este tipo de explosivos por el peligro y el ruido.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios