El Parlament cambiará a mediados de enero más de 400 bombillas de los salones y los pasillos de la Planta Noble por otras de bajo consumo, con lo que
reducirá un 88% el consumo energético actual de la cámara catalana.
La iniciativa permitirá también reducir en casi un 46% las emisiones de dióxido de carbono y conllevará un ahorro económico de
11.623 euros en la factura de la luz, según un estudio de la Comisión Ambiental del Parlament.
A pesar de que las bombillas de bajo consumo son más caras que las convencionales, el presidente de dicha comisión, Jordi Miralles, explicó que las de bajo consumo duran más, por lo que el cambio, según él, permitirá
"ahorrar dinero".
"Todos podemos colaborar para paliar los
efectos del cambio climático, ahorrar energía con un uso más eficiente y a la vez ahorrar dinero", afirmó en un comunicado del Parlament.
La cámara catalana está ahora pendiente del diagnóstico energético de la empresa de servicios ambientales Lavola, que hará lo mismo en tres departamentos de la Generalitat. Posteriormente, el Parlament se someterá a una auditoría ambiental con el objetivo de conseguir el certificado EMAS, el
máximo certificado de gestión ambiental en el ámbito europeo.
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