La marca creada por la Diputación para la promoción de la imagen y calidad de los productos agroalimentarios malagueños cuenta ya con más de 700 empresas entre productores, pequeños comercios, grandes superficies, mercados de abastos, lonjas, empresas distribuidoras y establecimientos de hostelería y restauración.

El diputado de Desarrollo Económico y Productivo, Jacobo Florido, ha entregado este lunes el distintivo de la marca a esta empresa que comenzó siendo un obrador de confitería que repartía dulces en el barrio de la Victoria de Málaga, y que a día de hoy tiene rutas por todo el territorio andaluz, Ceuta, Melilla y parte de la península.

Tal y como explica la familia Tejeros, las tortas locas nacieron como un dulce "quitahambres" pensado para ser sencillo y económico. Consiste en dos discos de hojaldre rellenos con crema pastelera, cubiertos con un glaseado de color naranja y rematados con un punto de guinda.

Este dulce, cuya receta se ha mantenido desde su origen, se ha convertido en una seña de identidad para Málaga al igual que los espetos, que también cuentan con el distintivo Sabor a Málaga, según han recordado desde la Diputación de Málaga.

Por último, el diputado ha destacado la apuesta por la innovación y el desarrollo sostenible de esta empresa, que ha incorporado a lo largo de los años las últimas tecnologías para mejorar sus sistemas de producción sin renunciar a la mano de obra artesana como seña de identidad y clave fundamental de la calidad de sus productos.