Así lo ha destacado Turismo Andaluz en un comunicado, recordando que, siglos atrás, el hammam (o baño árabe) se usaba como punto de reunión social y política, a la vez que para llevar a cabo el ritual de la higiene.
En la actualidad, esta tradición es más atractiva porque mezcla el mencionado concepto histórico (arquitectura arabesca) con tendencias de salud. Es decir, el hammam se aleja del concepto de los spas convencionales, para convertirse en un espacio de relajación que replica el hábito de los antiguos baños árabes.
El Hammam Al Ándalus se divide en tres salas. Cada una de ellas tiene el agua a una temperatura distinta: la templada, la caliente y la fría. Los contrastes térmicos calman y activan la circulación sanguínea y aportan sensación de relajación.
Además, los cambios de temperatura aportan beneficios terapéuticos, puesto que el cuerpo es propenso a la distensión cuando entra en contacto con el agua. Los especialistas afirman que el baño árabe resulta magnífico para personas con artritis, piernas agarrotadas, celulitis o estrés. El centro, además, ofrecen otros servicios como aromaterapia y masajes especializados.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios