Tal y como han informado estos colectivos, que han criticado "la impunidad con la que se cometen estos actos", los hechos ocurrieron el pasado domingo, 25 de febrero, y el animal fue rescatado por la protectora Bai.senpulgas, que le ha bautizado con el nombre 'Olaf'.

Los animalistas han recordado que este suceso "de extrema gravedad" puede suponer sanciones de hasta 30.000 euros o penas de un año de prisión y la inhabilitación para la tenencia, oficio o comercio de animarles por un máximo de 36 meses.

Ante estos hechos, han llamado a la ciudadanía a tener "tolerancia cero" con situaciones de crueldad, sadismo o abandono de seres vivos, y han remarcado que "cualquier silencio supone un gesto de complicidad con quien ejerce la violencia", siendo el caso de Olaf "el mejor ejemplo".

Esta no es la primera vez que estas organizaciones ofrecen una recompensa económica para tratar de esclarecer un suceso de maltrato animal, de hecho, mantienen la misma gratificación para dar con quien tiroteó una perra en Verín (Ourense), que tuvo que ser sacrificada por las lesiones sufridas.