Muchos asturianos son incluidos en este listado sin saberlo. Una pequeña deuda puede hacer que los consumidores se encuentren de la noche a la mañana con que sus nombres forman parte de las listas de morosos. El problema está en salir de ellas. Según denuncia la Unión de Consumidores de Asturias, esto ha dado origen al nacimiento de una serie de empresas que cobran a los usuarios por sacarlos de los ficheros. «Es algo totalmente ilegal», advierten desde UCE-Asturias.

Además, la asociación acusa a la Agencia de Protección de datos de permitir la inclusión de los consumidores en los listados de morosos sin que estos se enteren. La ley establece que las personas incluidas en estos dicheros tienen que ser avisadas en un plazo de 30 días desde que entran a formar parte de los registros, pero muchas se enteran «cuando van a solicitar un crédito y se lo deniegan».