El suceso tuvo lugar esta madrugada sobre las 3.37 horas, cuando la Sala 092 alertó a las unidades policiales que en la pedanía de Los Dolores, un grupo de jóvenes había sido asaltado por dos individuos, amenazándoles con un hacha y un machete.

Los dos individuos les sustrajeron dos teléfono móviles, dándose a la fuga en una furgoneta de color blanca dirigiéndose hacia la pedanía de Los Garres. Gracias a la matrícula, los agentes comprobaron que no estaba denunciada por robo en esos momentos, según explican las mismas fuentes.

Dicho vehículo fue localizado en la calle Santa Rita junto al bloque 3, realizando la unidad policial una espera hasta que vieron subir al automóvil dos personas, iniciando la marcha hacia la calle Cali Josefa Romero.

Al detectar la presencia policial, ambos sujetos abandonaron la furgoneta, dejándola en marcha, pero sin llevar llaves, emprendiendo la huida a pie dirigiéndose hacia la avenida de la Fama.

Los agentes localizaron a uno de ellos escondido bajo un vehículo, procediendo a su detención e identificación, resultando ser un hombre

de 30 años, vecino de Santomera.

En el registro del vehículo se encontraron dos casos de motocicleta y en el cacheo al detenido se le intervino una navaja, un martillo rompecristales, una linterna y dos teléfonos móviles que se correspondían con los sustraídos.

Asimismo, se encontró una varilla de aceite 'espadilla' para abrir vehículos, un par de guantes y dinero en efectivo, manifestando el detenido que el conductor del vehículo era un amigo, también titular de la furgoneta.

Los agentes comprobaron después que no era el titular el que se dirigía a denunciar la sustracción en esos momentos de la furgoneta, sino que se la habían sustraído esa misma noche.

Consultada la base de datos de Policía Nacional, el detenido tenía un largo historial por delitos de robo con violencia y sustracción de vehículos, habiendo sido puesto en libertad a finales del año pasado tras cumplir una condena de once años por atraco a gasolineras.