Arrancan las obras de reforma de las calles Atocha y Carretas: vía libre para el peatón en detrimento del coche

La calle Atocha, con las primeras señalizaciones de obra ya colocadas.
La calle Atocha, con las primeras señalizaciones de obra ya colocadas.
JORGE PARÍS
La calle Atocha, con las primeras señalizaciones de obra ya colocadas.

Las obras de la calle Atocha y la calle Carretas, dos de las arterias más populares y transitadas del distrito Centro, arrancaron el pasado viernes y desde este lunes se llevarán a cabo de forma intensiva.

Los trabajos se enmarcan dentro de la estrategia que está siguiendo desde el inicio de la legislatura el Gobierno municipal (Ahora Madrid) para dar más protagonismo dentro de la ciudad al peatón, la bicicleta y el transporte público en detrimento del vehículo privado, lo que redundará en la mejora de la calidad del aire.

La administración local continúa de esta forma con la línea de las actuaciones previstas próximamente en la Gran Vía y de la futura transformación del eje Norte-Sur (Paseo de la Castellana-Paseo de Recoletos-Paseo del Prado). El plazo de ejecución de las obras es de 18 meses, pero podrían finalizar antes:Atocha en marzo de 2019 y Carretas en diciembre de 2018. Se invertirán casi siete millones de euros.

En concreto, la calle Atocha cambiará su configuración actual en el tramo comprendido entre la glorieta del Emperador Carlos V y la Plaza de Antón Martín para "recuperar este eje como una de las principales vías de acceso al centro histórico". "Actualmente, la calle Atocha presenta un aspecto bastante deteriorado, con aceras en mal estado, baldosas hundidas y escaso mobiliario urbano situado en puntos poco atractivos, lo cual no fomenta su utilización. El aparcamiento se dispone además de forma un tanto caótica", señala un informe del Consistorio.

El plan municipal contempla en este eje la reducción del espacio para el vehículo privado, que contará con un carril por sentido en lugar de los dos actuales. De esta forma, en sentido subida (hacia Antón Martín), Atocha contará con un carril exclusivo para autobuses y taxis y otro destinado al tráfico privado y a la bicicleta limitado a 30 kilómetros por hora, lo que se conoce como ciclo-carril. La bicicleta tendrá también con un espacio exclusivo desde la calle Cenicero hasta la calle San Pedro, la zona que presenta una mayor pendiente. En sentido bajada (hacia la glorieta de Carlos V), habrá un ciclo-carril durante todo el tramo.

El proyecto prevé actuaciones de ampliación de aceras, la introdución de nuevos pasos de peatones, la reordenanción de aparcamientos y la renovación y redistribución del mobiliario urbano. También se instalarán aparcamientos de bicicletas en los lugares más demandados por los usuarios, fuentes para beber, se cambiará de sitio el aparcamiento de Bicimad y se renovará el alumbrado público.

Por su parte, la calle Carretas se peatonalizará para "dar continuidad al eje para peatones que arranca en la calle Fuencarral, continúa por Montera y llega hasta la Puerta del Sol". Con esta actuación, los peatones podrán ir caminando sin tráfico de vehículos desde Sol hasta la Plaza de Jacinto Benavente.

En la actualidad, esta vía de gran afluencia peatonal presenta dificultades de movilidad debido a la "existencia de obstáculos como la marquesina de la parada de autobús  2494 o el acceso al aparcamiento de Jacinto Benavente que generan barreras". Esta  situación se junta con la existencia de tráfico rodado, una banda de aparcamiento en línea y la línea 50 de la EMT que tiene su inicio en el número dos de la calle.

El Ayuntamiento de Madrid pretende también eliminar el acceso desde esta calle al aparcamiento de Jacinto Benavente para construir una zona de descanso donde habrá bancos. Carretas se configurará como una plataforma única (acera y calzada al mismo nivel) de prioridad peatonal accesible, con más árboles y un mejor pavimento.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento