El fiscal, en sus conclusiones provisionales, califica los hechos de asesinato y dos delitos intentados de asesinato y pide 75 años de prisión para el acusado, así como la privación de la patria potestad respecto de los menores y la prohibición de aproximarse a ellos a menos de 500 metros y comunicarse con ellos por un periodo de 30 años superior a la pena de prisión.

Así mismo, el ministerio público pide para el procesado la medida de libertad vigilada durante 10 años y que la clasificación en tercer grado penitenciario no se pueda realizar antes del cumplimiento de la mitad de la pena que eventualmente se imponga.

Por su parte, las acusaciones particular y popular piden en sus escritos provisionales las mismas penas que el fiscal, mientras que la defensa del acusado pedía la absolución, aunque, tras reconocer el procesado los hechos, cambiará sus conclusiones al final del juicio.

El acusado se ha negado a contestar a las preguntas de las partes, indicando que no tenía nada que declarar, y se ha limitado a reconocer los hechos, señalando que se declaraba "culpable"; ha aceptado las penas que se piden para él y ha pedido perdón a la familia de su mujer. "Lo siento", ha concluido.

DECLARACIONES

Después de reconocer los hechos, las partes han renunciado a parte de los testigos y en la jornada de este lunes tan sólo han declarado dos hermanos de la víctima. Uno de ellos ha señalado que tenía poco contacto con ella, mientras que la hermana, que se hizo cargo de los menores, ha subrayado que entre 2014 y 2016 estaba "muy mal" la relación entre el acusado y su mujer.

En este sentido, ha manifestado que su hermana buscaba ayuda para separarse del acusado, quien "siempre controlaba lo que hacía y sus amistades". Así mismo, ha subrayado que su hermana estaba "muy mal" psicológicamente y que tenía miedo.

Posteriormente se ha reproducido, a puerta cerrada, la declaraciones que realizaron los menores en sede judicial sobre los hechos. El juicio continuará este martes con la declaración de los peritos médicos.

El fiscal sostiene en su escrito de conclusiones provisionales que, tras comunicarle la víctima su intención de separarse, en julio de 2016 el acusado, hacia las 7.00 horas y cuando su mujer se encontraba sentada en una cama del domicilio familiar, la degolló con un cuchillo y le ocasionó de forma inmediata la muerte.

Posteriormente, el procesado se dirigió a su hija y le propinó un corte con un cuchillo afilado en el cuello y le tapó la cabeza con una almohada creyendo que había fallecido.

ATACÓ AL NIÑO

Así mismo, según el fiscal, atacó también a su hijo con un cuchillo y le gritó que así "aprenderían" a respetarle. El niño logró salir de la habitación y se fue al salón, donde su padre continuó lanzándole cuchilladas, por lo que el menor cayó y el acusado se puso encima de él y comenzó a golpear su cabeza contra el suelo.

El niño, en sus intentos de huir, golpeó con la pierna a su hermana lo que hizo que ésta recuperara la conciencia y los dos comenzaron a gritar. Entonces el procesado detuvo su ataque y los dos hermanos se refugiaron en el cuarto de baño arrastrándose debido a sus múltiples y grave heridas, desde donde suplicaron a su padre que llamara a una ambulancia, lo que hizo éste.

Como consecuencia de los hechos, los niños sufrieron múltiples heridas, así como secuelas, tanto físicas como psíquicas.