De hecho, según informa el ente público Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), el soterramiento de la línea eléctrica finalizó el pasado mes de diciembre, tras los trabajos acometidos por Endesa, al amparo del convenio y la adenda firmados con AENA. Esta actuación permitió eliminar el obstáculo que dicha línea representaba para la operativa de los aviones.

Hasta entonces y mientras concluía la obra, el umbral de la cabecera 21 tuvo un emplazamiento provisional, con el objeto de hacer factible el uso de ambos extremos de la pista por parte de las aeronaves. Para ello, también fue necesario implantar un procedimiento por el que los aviones que necesitasen despegar disponiendo de toda la longitud de la pista lo hicieran por la cabecera 21, mientras que los que requiriesen su extensión completa para aterrizar, lo hicieran por la 03.

Una vez concluido el soterramiento y los trabajos para desplazar el umbral de la cabecera 21 hasta su ubicación definitiva, la pista se pone este jueves en servicio, con la posibilidad de aterrizar y despegar con toda su longitud disponible por cualquiera de las dos cabeceras.

Con las nuevas distancias declaradas, la pista de Córdoba se habilitapara la operativa de aviones de mayor tamaño, como por ejemplo unAirbus A319, y con más capacidad, tanto en términos de pasajeros, comode alcance.

Con una inversión de casi 6,3 millones de euros para el soterramiento(ejecutado por Endesa en instalaciones de su propiedad con lafinanciación del gestor aeroportuario), y de 226.900 euros para eldesplazamiento del umbral, AENA pone de manifiesto, una vez más, suapuesta por el Aeropuerto de Córdoba.