El ritmo de venta de billetes para la conexión ferroviaria entre ambas ciudades es de 1.600 diarios, casi todos ellos por Internet.

Hay que tener en cuenta que se pueden comprar para cualquier fecha de los dos próximos meses.

Con los datos de reservas, el tren con más demanda entre Valladolid y Madrid es el Alvia que sale de aquí a las 18.01 h. Tiene ya agotados los billetes de los días 23, 25 y 26 de diciembre y 1, 2 y 7 de enero. Tampoco se puede coger ya el Alvia de las 22.10 h el día de Navidad y el de Año Nuevo.

En el sentido contrario, Madrid-Valladolid, el Alvia de las 14.40 h se ha agotado tres días de la primera semana: el 23, 24 y 28 de diciembre.

Los trenes AVE, propiamente dichos, tienen 310 plazas (195 de turista y 115 de preferente) y los Alvia, que continúan hacia otras ciudades por vías normales, 299 asientos (263 de turista).

En total, todas las combinaciones de alta velocidad ofrecen 6.788 plazas diarias en cada sentido, un 84% más de las existentes hasta ahora.

Las conexiones con Madrid se completan con seis regionales exprés diarios, que pasan por Medina y Ávila.

La estación se pone guapa

La primera en llegar fue la escalera mecánica. Ahí se dejaban notar los primeros cambios que traía el AVE a la estación. Le siguieron las mamparas, los carritos para llevar las maletas, los relojes Festina, los carteles electrónicos de señalización de las vías... Y ahora ha llegado la máquina de rayos X para revisar el equipaje y unas nuevas papeleras. Como curiosidad, éstas últimas tienen tres huecos para reciclar: papeles, envases y restos de comida. A la entrada se ha levantado un gran monolito verde donde pone bien grande: «Estación del Campo Grande».