Las primeras nevadas en Galicia provocaron los primeros incidentes de la temporada otoño e invierno en el tráfico de la autovía de las Rías Baixas a su paso por la provincia de Ourense, e incluso obligó a detener la circulación de decenas de camiones y autobuses durante una media hora.

Así, las primeras nevadas, que supusieron hasta 35 centímetros de espesor en Cabeza de Manzaneda (Ourense) en la madrugada de hoy, obligaron a la Dirección General de Tráfico a decretar la alerta en Ourense, en especial en la zona fronteriza con la provincia castellano-leonesa de Zamora.

Precisamente, la autovía de las Rías Baixas fue la calzada más afectada por la climatología adversa y obligó a prohibir el paso de camiones, vehículos articulados y autobuses a la altura del kilómetro 129, a su paso por A Gudiña. Además, la Guardia Civil de Tráfico decretó el uso obligatorio de cadenas a turismos y todoterrenos.

Esta situación provocó nieves en el Alto do Poio, en Piedrafita (Lugo), aunque no originaron incidentes y sólo se decretó obligatorio el uso de cadenas. No obstante, diferentes puntos de la geografía ourensana obtuvieron niveles de espesor de nieve que alcanzaron los cuatro centímetros en el Xurés o en A Veiga, o dos centímetros en Lardeira.

Por el contrario, las carreteras gallegas contabilizaron tres accidentes de circulación --uno en ciudad y otros dos en vías interurbanas-- que dejaron otros tantos heridos en las provincias de A Coruña y Pontevedra, dos de ellos con sendos traumatismos craneales.

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