"Tenemos que seguir avanzando en favorecer hábitos de movilidad más positivos para la ciudad, como los desplazamientos en autobús y tranvía", ha destacado la concejal de Medio Ambiente y Movilidad, Teresa Artigas.

"Zaragoza cuenta con una red amplia y bien conectada que da un buen servicio a toda la ciudad. No obstante, las decisiones de cómo nos movemos son un compromiso personal de cada una de los vecinos de Zaragoza, pero basadas en la confianza que tienen en el servicio de bus y tranvía, y eso es responsabilidad del Ayuntamiento", ha añadido, expresando, además, "una apuesta decidida por parte de este Gobierno en la mejora del servicio, que se va a centrar en la renovación de la flota con vehículos híbridos y eléctricos, y el refuerzo del servicio en los barrios más periféricos".

El autobús urbano de Zaragoza transportó en 2017 a un total de 88.989.785 viajeros, un 11,25 por ciento más que en 2016, en el que se registraron 80.659.078 validaciones. El consistorio ha advertido de la "dificultad de establecer comparaciones" porque los datos de 2016 están distorsionados por los efectos de la huelga.

La recuperación de viajeros del bus urbano tras la huelga se consolidó en el primer trimestre de 2017, con un repunte del 0,16 por ciento respecto al ejercicio anterior, ha detallado el consistorio en una nota de prensa.

Las líneas más utilizadas en 2017 han sido la 24 (7,5 millones), la 33 (6,5 millones) y la 39 (con 5,6 millones). Las validaciones de tranvía se han incrementado un 0,98 por ciento, pasando de 27.963.700 en 2016 a 28.236.574 en 2017.