En estos tramos, Tráfico vela por la seguridad y cumplimiento de las normas de manera especial intensificando las labores de vigilancia "con el objetivo, -según ha explicado en una nota de prensa la subdelegada-, de proteger a los miles de usuarios de bicicleta que salen principalmente los fines de semana a practicar su deporte preferido, de modo que dispongan de rutas especialmente vigiladas".

Las Rutas Ciclistas Protegidas de la provincia están localizadas entre los kilómetros 0 y 8,2 de la H-30 que une Gibraleón y Huelva; entre los kilómetros 92 y 113 de la N-431 que une Gibraleón y Cartaya; entre los kilómetros 0 y 10,9 de la A-5058 en Cartaya; y en la A-499 que conecta los municipios de Villablanca, San Silvestre de Guzmán y Villanueva de los Castillejos entre los puntos kilométricos 0 y 31.

La selección de estas rutas se ha realizado en colaboración con las distintas administraciones, instituciones y asociaciones de ciclistas. En toda España hay más de 4.600 kilómetros de carreteras especialmente protegidas para los ciclistas.

Entre otras medidas, en estos tramos se intensifican las medidas de vigilancia para velar por el cumplimiento de las normas de seguridad relativas a la distancia lateral en el adelantamiento de ciclistas, velocidad inadecuada o maniobras antirreglamentarias, así como se refuerzan en estos tramos y vías de acceso los controles preventivos de consumo de alcohol y otras drogas.

"En definitiva, con estas medidas lo que se busca es aumentar la seguridad vial de todos los usuarios de nuestras carreteras, promover la convivencia y fortalecer una buena cultura vial", ha incidido Grávalos, quien ha recordado que este año en la provincia han perdido la vida dos ciclistas en sendos accidentes de tráfico.