El alcalde de Sevilla, el socialista Juan Espadas, y el delegado territorial de la ONCE en Andalucía, Cristóbal Martínez, han presentando este jueves los nuevos dispositivos para personas ciegas que se instalarán en un total de 227 semáforos de la ciudad y que emiten una señal acústica cuando éste se encuentra en verde sólo si hay un invidente que pretenda cruzar, en vez de cada vez que cambiaba de color, como ocurría hasta ahora. Así, la persona ciega activará el semáforo mediante una aplicación móvil telefónica, que se comporta como un mando a distancia, con tecnología bluetooth.

Tras comprobar el funcionamiento de estos dispositivos en el cruce entre las avenidas Eduardo Dato y Luis de Morales, Espadas ha explicado que la ciudad tenía 101 cruces con dispositivos semafóricos que daban un aviso acústico cada vez que se ponía en verde desde las 7,00 hasta las 23,00 horas, momento en el que se apagaban para no molestar a los vecinos. Sin embargo, todos ellos serán sustituidos por estos nuevos dispositivos y además se duplicará la cifra de cruces que cuentan con este tipo de avisos, alcanzando casi el 50 por ciento de los existentes en la ciudad.

Así, se pasará de 101 a 227 cruces, que estarán plenamente activos a final de 2018 y principios de 2019. Esos 101 cruces serán los primeros en ser cambiados, al ubicarse en zonas de especial afluencia, como el entorno de centros comerciales. Las áreas de instalación han sido seleccionadas junto a la Fundación Once.

Espadas ha destacado que "afortunadamente hoy la tecnología permite estos dispositivos", para cuya instalación se han invertido unos 370.000 euros. "Era una decisión largamente esperada porque Sevilla necesitaba una apuesta más firme para sustituir su red semafórica, apostando por la accesibilidad y la superación de barreras. Es una aplicación de 'smart city', aplicando la tecnología al servicio de las personas, reduciendo en este caso los peligros evidentes en los cruces por el tráfico", recalca el alcalde, que considera que Sevilla se coloca así "a la vanguardia".

Al respecto, Martínez ha señalado que se trata de un "regalo de Navidad" que ha hecho el Ayuntamiento ante la necesidad existente de renovar la señalización acústica de los semáforos, con nuevos dispositivos modernos y funcionales que no molestan a los ciudadanos a ninguna hora del día pero sí prestan un servicio adecuado a los ciudadanos con ceguera o deficiencia visual. "El dispositivo acústico es vital para moverse con seguridad", recalca, tras señalar que esto supone "una mejora sustancial, que marca un antes y un después en la ciudad".

En la prueba de este dispositivo han estado diversas personas con deficiencias visuales, como José María Ortíz, que se ha mostrado "muy contento porque es una mejora muy grande en seguridad, ya que los semáforos avisarán cuando se puede pasar y será más fácil de localizar". "Además, no estarán sonando permanentemente y contaminando acústicamente la zona, sino que sólo avisará cuando una persona ciega lo requiera", añade.

Además, añade que el uso de este sistema abre la puerta a que en un futuro se implemente otras actuaciones, como "el poder activar el aviso de parada en los autobuses a demanda del usuario, la localización de las máquinas expendedoras de títulos de transporte o la megafonía en las paradas de autobuses, unas posibilidades que esperamos que se tengan en cuenta".

En la misma línea, Maite Espinosa ha valorado la mejora en accesibilidad, teniendo en cuenta que "reduce la inseguridad ante un semáforo y permite que se sea más independiente sin tener que preguntar a otras personas para poder cruza". "Se hace que la ciudad sea mejor para todos", agrega, algo en lo que también coincide Carlos Hernández, que considera que se trata de "una medida extraordinaria que trae seguridad y hace que no se depende de terceras personas que pueden generar confusión". "Ojalá se extienda a toda la ciudad", concluye.