Muy distinto de Peter Pan

Laia Ripoll dirige Los niños perdidos, una obra en la que se recoge uno de los episodios menos conocidos del franquismo.

No es preciso trasladar la mente a Argentina o  Chile para encontrar niños arrancados de sus familias, criados con los asesinos de sus padres o abandonados en el tren sin destino procedente de un campo de concentración o de una cárcel.

La Compañía Micomicón, que lleva haciendo teatro comprometido desde su fundación en 1991, pone en escena Los niños perdidos, un montaje escrito y dirigido por Laia Ripoll.

Para la composición de este texto, duro y reflexivo, la dramaturga se sirvió del estudio de los periodistas Ricard Vinyes, Montse Armengou y Ricard Belis, así como de la poesía popular de la época.

Tres niños y una monja ciega, a los que dan vida Juan Ripoll, Mariano Llorente, Marcos León y Manuel Agredano, crean a través de su interacción y su tragedia un fiel reflejo de lo que fueron aquellos años para muchos niños de la guerra.

Las conocidas historietas de Paracuellos del dibujante y guionista Carlos Giménez sirvieron de referencia visual para crear una atmósfera opresiva, sórdida y totalmente alejada de cualquier imagen que el recuerdo de la infancia debiera albergar. Giménez les ha hecho, además, el cartel del montaje para las funciones.

La compañía cuenta ya con un prestigio en el escenario. En 2002, recibió el Premio ojo Crítico que otorga Radio Nacional de España. Todos sus montajes, entre los que cabe destacar Atra bilis o La ciudad sitiada han recibido numerosos premios y menciones de la profesión.

* Hoy, a las 20.00 horas, en la Colegiata de San Juan Bautista (Plaza del Marqués, 2). Gratis.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento