Estos "hoteles de insectos" son instalaciones en las que se dejan ramas, tejas, troncos con el objetivo de dar cobijo a los insectos y fomentar su existencia para que puedan ser parte del ecosistema de los jardines donde se instalan, han informado a Europa Press fuentes municipales.
Estas instalaciones cumplen la función de diversificar al máximo la oferta de sitios de nidificación y facilitan un refugio lleno de "habitaciones" preparadas para darles cobijo en la época invernal, periodo en el cual son más vulnerables.
Dos de estos "hoteles" se instalaron por escolares del municipio y gracias a la financiación del Programa de Promoción del Voluntariado Ambiental 2017 de la Obra Social Caja Burgos-La Caixa.
Esta jornada también contó con el apoyo de la Asociación Forestal de Valladolid, que realizó una pequeña charla sobre la necesidad de fomentar los insectos como forma de controlar plagas de manera ecológica.
Los "hoteles de insectos" se han instalado en diversas grandes ciudades como Ámsterdam, París, Bilbao y Madrid, en ésta última en el Jardín Botánico.
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