El conseller de Educación y Universidad, Martí March, ve "difícil" y "problemático" el Pacto Social y Político por la Educación, "y más ahora por la complejidad territorial que existe a nivel de todo el Estado por el tema catalán".

Así lo ha indicado en declaraciones a los medios en el Senado, antes de comparecer en la Ponencia de Estudio sobre el Pacto educativo, donde ha apuntado que a él le hubiera gustado "un pacto a la balear", que "sale de la comunidad educativa". "Este momento es necesario que (el pacto) esté legitimado por la comunidad educativa, no sólo por los políticos", ha apostillado.

Para March, la ley educativa que salga de un fututo consenso social y político tiene que ser "flexible" y servir para "delimitar de forma clara" las competencia del Estado y de las comunidades autónomas "para impedir interferencias y duplicidades". A su juicio, es importante que la futura normativa "defina muy bien el papel de cada uno".

Además, ha planteado que la Conferencia Sectorial de Educación -presidida por el ministro de Educación e integrada por los consejeros del ramo- se convierta en "una conferencia federal" para que haya "una igualdad entre el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas" y los problemas competenciales se resuelvan "por consenso".

MARCH DEFIENDE "UN PACTO EDUCATIVO A LA BALEAR"

Posteriormente, en la ponencia, March ha defendido "el procedimiento de elaboración del pacto educativo que se ha impulsado en Baleares" y que cree que es el que "se tendría que seguir también a nivel estatal".

"En Baleares se ha partido de un documento elaborado por parte de la comunidad educativa, que ha pasado por el Consell Escolar y que ha llegado al Parlament para su debate político", ha explicado.

Además, ha valorado de manera "muy positiva" la transferencia de la gestión educativa a las comunidades autónomas, que "ha sido un éxito porque a pesar de que, al menos en el caso de Baleares, fueron transferidas con una dotación insuficiente, las autonomías han demostrado que la proximidad es clave para responder a las necesidades tan diversas que se viven en el Estado español".

ESPÍRITU FEDERAL

Por eso ha considerado imprescindible dentro del Pacto Educativo estatal incluir una modificación de la Conferencia Sectorial de Educación, "que tendría que ser un organismo con un espíritu y una regulación federal", repensar los programas de cooperación territorial y delimitando el que corresponde a la ley educativa general y el que corresponde a las comunidades, "las autonomías también somos Estado".

Por otro lado, March ha hecho un repaso de los retos a los que tendría que dar respuesta el Pacto Educativo a nivel estatal. Por un lado a la inestabilidad actual, con leyes que cambian cada pocos años y que no ayudan a consolidar ninguna medida.

Además, el conseller ha reclamado una acción clara del gobierno central en la regulación de la educación 0-3 años y en su financiación, apostar por la universalización progresiva de la educación hasta los 18 años y ha dicho "que la formación universitaria también tiene que formar parte del Pacto Educativo".

CENTROS INTEGRADOS DE FORMACIÓN PROFESIONAL

March ha dedicado una parte de su discurso a la FP, una línea educativa que cada vez tiene un papel más destacado para atender una demanda profesional. "Creemos que tenemos que apostar por los centros integrados de Formación Profesional que permiten ofrecer un abanico completo de formación, tanto reglada como ocupacional", ha remarcado.

Por otro lado, ha hecho referencia expresa al hecho de que Baleares es una comunidad con dos lenguas oficiales y que uno de los objetivos "es educar para una sociedad plurilingüe no monolingüe".

Respecto a la Lomce, ha hecho hincapié en la necesidad de "hacer cambios" en ella "mientras se llega a una nueva ley educativa".