En la madrugada de ayer, 70 metros del tramo final del dique cayeron al mar, cedidos ante olas de hasta 11,6 metros, según registró la boya que la Agencia Vasca de Meteorología (Euskalmet) tiene situada en la zona.

Olas que también llegaron al Puerto Deportivo de Getxo. Aquí, el Ayuntamiento tuvo que cerrar desde la mañana el Muelle de Arriluze ya que el mar estaba inundando la costa. Además, rachas de viento de hasta 120 kilómetros horas esparcieron trozos de cemento por el litoral y varios locales, entre ellos el acuario, quedaron inundados.

Eso en la costa, donde la baja profundidad y el viento atenúa el mar. Porque según Euskalmet, en alta mar las olas llegaron a los 18 metros. Con este panorama, el ferry entre Bilbao y Portsmouth no salió ayer como tampoco han partido buques mercantes en Bermeo desde el domingo. En esta localidad, el rompeolas fue parcialmente derruido y varios barcos soltaron amarras por el temporal.

Mar «desfasado», surf en el río

«El mar está desfasadísimo. Es insurfeable. Así que la gente está cogiendo olas en la ría de Bakio o en el río Urumea, en Donostia», explica Zuberoa Andrés, desde la Federación Vasca de Surf. Una estampa extraña que sólo se repite contadas veces al año.

3 preguntas sobre...

El oleaje registrado  en el litoral

1¿A qué se debe?

El anticiclón de las Azores se junta en el Atlántico con una borrasca de las Islas Británicas y provoca vientos de componente noroeste sobre Euskadi.

2¿Qué debemos hacer?

Euskalmet recuerda que ante el fuerte viento no hay que dejar objetos sueltos en las ventanas o los balcones. Se desaconseja acercarse a los malecones a ver las olas, «porque pueden ser traicioneros», y no practicar deportes acuáticos.

3¿Beneficia a alguien?

Sí, a los surfistas. La Federación Vasca de Surf planea celebrar este mes dos campeonatos de olas grandes (más de 4 metros) en Punta Galea y la central de Lemóniz.