Así lo han trasladado el responsable de Organización de Izquierda Unida en Castilla-La Mancha, Jorge Vega, y el responsable regional de Acción Política de IU, Txema Fernández, que se han reunido con el director general de Presupuestos de la Junta, Isidro Hernández, para analizar el borrador de las cuentas regionales, ha informado esta formación política en nota de prensa.

En el encuentro, IU ha planteado sus dudas en materia de gasto social, "ya que son los presupuestos regionales los que marcan la línea política de hacia dónde quiere ir la región durante el año 2018, y no se corresponde el discurso del Gobierno regional de grandes cifras de inversión, con las realidad que vive la mayoría social en Castilla-La Mancha dónde no se mejoran las ratios de profesores y las plantillas médicas siguen siendo insuficientes", ha manifestado Jorge Vega.

Además, en el análisis que ha llevado a cabo este partido político para abordar las cuentas, reflejan que "en materia sanitaria se mantienen privatizados servicios no sanitarios por importe cercano a los 400 millones de euros; y la educación mantiene el mismo porcentaje de gasto que en ejercicios anteriores y aumentado el gasto en profesores de religión", ha declarado Txema Fernández.

FUNDACIÓN AMANCIO ORTEGA

En otro sentido, han mostrado su "malestar" por el gasto de más de siete millones que va a suponer para nuestra región la Fundación de Amancio Ortega. "A cambio de más suelo industrial en Marchamalo, esta fundación destinará una importante suma de sus fondos privados para la compra de tecnología para detección de cáncer, algo que debe hacer la Administración y no esperar a la buena voluntad de un millonario", apuntan.

La formación también ha destacado la "falta de rigor presupuestario" al pagar una deuda de 1.808 millones de euros sin previamente elaborar un trabajo de auditoría con el que "asegurar que ese gasto hay que hacerlo de forma obligatoria, o podría usarse para atajar los problemas sociales que tiene esta región".

"En definitiva unos presupuestos que continúan manteniendo demasiados servicios privatizados y que introducen conceptos benéficos que son impropios de un gobierno que trabaja para la mayoría social", han concluido desde IU.