Según ha informado la Guardia Civil en una nota de prensa, los investigados habrían entrado el pasado mes de octubre en dos casas de campo de uso temporal, con la intención de "comprobar lo que había de valor en su interior", volviendo posteriormente una noche para llevarse aquellos objetos que consideraron de su interés.

Habrían también sacado varios enseres antiguos que ocultaron en las proximidades de los cortijos para llevárselos luego, y cuando ya se disponían a ir a por el vehículo, fueron identificados por una patrulla de la Guardia Civil, no pudiendo actuarse contra ellos en ese momento "al no tener constancia del delito cometido y no llevar ningún objeto cuando fueron sorprendidos".

A la mañana siguiente, cuando los propietarios de las viviendas descubrieron los robos y pusieron las denuncias, la Guardia Civil relacionó a los ahora investigados con los hechos, e inspeccionó la zona donde se encontraron ocultos los efectos sustraídos, quedando estos en poder de sus legítimos propietarios.

Seguidamente, la Benemérita localizó a las cuatro personas identificadas, procediendo a su investigación como supuestos autores de dos delitos de robo en grado de tentativa, y quedando pendiente de lo que disponga la autoridad judicial.