La experiencia piloto se llevará a cabo en nueve ayuntamientos: Oviedo, Avilés, Tineo, Siero, Castrillón, Llanes, Ribadedeva, Colunga y Caravia; ocho residencias del ERA: Centro Polivalente de Recursos (CPR) de El Cristo (Oviedo), Residencia Mixta (Gijón), Canapés (Avilés), Palacio de Villar (Castrillón), Valentín Palacio (Siero), Santa Bárbara (San Martín del Rey Aurelio), Moreda (Aller) y Belmonte; ocho equipos de atención primaria: Piedras Blancas (Castrillón), Sabugo y El Quirinal (Avilés), Ventanielles (Oviedo), Pola de Siero (Siero), Severo Ochoa (Gijón, Llanes-Ribadedeva y Colunga-Caravia) y dos hospitales: HUCA (Oviedo) y Francisco Grande Covián (Parres).

Esta fase inicial pretende validar los materiales elaborados y los perfiles de las personas maltratadas. Además, se desarrollarán campañas de concienciación y formación para profesionales. Junto a la detección y protección ante casos de maltrato, el protocolo impulsará el empoderamiento de las personas mayores y la promoción del envejecimiento activo.

Así lo ha explicado este lunes en la Junta General la consejera de Servicios y Derechos Sociales, Pilar Varela, que ha comparecido a petición propia en la Comisión del área junto a los directores generales de Planificación, Ordenación e Innovación Social, Nerea Eguren Adrián, y de Salud Pública, Julio Bruno.

Pilar Varela ha explicado que este pilotaje del protocolo se articula dentro del plan sociosanitario, a la vez que se ultima la estrategia de envejecimiento activo, prevista para el año que viene. "Lo importe que es la formación de los profesionales de todos los sistemas en una misma dirección. Puede parecer sencillo pero es lo más difícil: trabajar todos con los mismos métodos y las mimas herramientas", ha aseverado.

Por su parte, Julio Bruno ha señalado que la mayoría del maltrato a personas mayores se produce "en el ámbito domiciliario". Igualmente, ha dicho que "el componente de violencia producido por la pareja es el más importante de todos los componentes que se encuestan".

Los grupos parlamentarios, que han reconocido la importancia de poner en marcha este protocolo de actuación para atajar una problemática poco conocida, han lamentado que no se haya articulado antes y perciben la necesidad de una mayor participación de los colectivos de personas mayores pidiendo, también, un refuerzo de los recursos humanos.

OBJETIVOS DEL PROTOCOLO

El objetivo es que los profesionales del ámbito social y sanitario trabajen de forma coordinada para promover el buen trato, prevenir y detectar maltrato físico, psicológico, sexual y económico o por dejación y negligencia, así como mejorar la concienciación social y el empoderamiento de las personas mayores.

Nerea Eguren ha incidido en que actualmente no existe un protocolo estatal y cada comunidad tiene herramientas propias. Mientras se articula una pauta ministerial, en Asturias este protocolo supondrá "un avance" en el buen trato y la intervención institucional ante el maltrato a personas mayores, ha asegurado.

Según la directora general, este protocolo pretende dar respuesta a la demanda de los profesionales para disponer de herramientas sistematizadas para objetivar las situaciones de maltrato y el grado, de tal forma que faciliten tanto la detección como la atención a personas mayores en situación de maltrato, en la línea de la experiencias sobre violencia de género o maltrato infantil.