Según un comunicado conjunto de ambas instituciones, las detenciones forman parte de la cuarta fase de la 'operación Mastín' contra una red de cultivo de drogas en interiores, que acumula 41 detenciones, 25 registros en 11 provincias distintas y el decomiso de 30.351 plantas y 74.500 euros.

En esta operación se han incautado, además de las plantas, de 34,5 kilos de semillas, 1.180 gramos de cogollos, 32.200 euros en efectivo, un vehículo y varios efectos y documentación.

Con este golpe policial, se da por anulada la capacidad de producción de la red, que actuaba en varios puntos de España para dificultar su detención y asegurar su continuidad, y se han desmantelado 12 plantaciones en total, todas en provincias distintas.

La red se había instalado en viviendas unifamiliares y otros inmuebles en los que realizaban tanto el cultivo como el secado y el envasado, y que también eran utilizados como pisos seguros para los arrestados, que no pasaban más de cinco o seis días seguidos en ellos, ha informado la Policía Nacional.

Habían ideado un sistema que, gracias al forrado de las habitaciones con aislante térmico, evitaba que se filtraran olores al exterior.