El PP ha denunciado el "deterioro sin precedentes" de la sanidad pública por la "inacción" del Gobierno de Cantabria y de la consejera de este área, la socialista María Luisa Real, y ha pedido un nuevo Plan de Ordenación de Recursos Humanos del Servicio Cántabro de Salud (SCS) para "adecuar las necesidades de personal" y "fidelizar" y "garantizar mejores condiciones de trabajo" a sus profesionales.

Los 'populares' llevarán al Pleno del Parlamento regional del próximo lunes, 30 de octubre, la reclamación de este plan, según ha anunciado este viernes en rueda de prensa la presidenta del PP de Cantabria y exconsejera de Sanidad, María José Sáenz de Buruaga.

La dirigente popular ha opinado que el Plan de Recursos Humanos del SCS vigente, que data de 2007, está "totalmente desfasado hoy" y ha reivindicado que "la Administración tiene la obligación de saber de qué recursos humanos dispone, cuántos necesita, dónde y cómo garantizarlos".

Sáenz de Buruaga ha tildado de "alarmante" la actual situación asistencial en Cantabria por la "insuficiencia" de médicos de Atención Primaria y sobre todo de pediatras y ha tildado de "asfixiante" la sobrecarga asistencial que soportan los profesionales sanitarios.

Además, ha defendido que sus condiciones de trabajo, caracterizadas, a su juicio, por la "precareidad" y la "alta interinidad", son "mucho peores" que las comunidades autónomas vecinas, a lo que -ha dicho- "se suma la falta de reconocimiento y motivación profesional" y "en los últimos tiempo un déficit de diálogo" con una Consejería que, según ha criticado, hace "oídos sordos".

Con estas circunstancias, Sáenz de Buruaga ha censurado que, ante esta situación de la sanidad y de sus profesionales, la consejera no ha adoptado "ninguna" medida correctora ante esta situación salvo la de reclamar a la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat (PP), más médicos mientras ella se muestra "incapaz de ganar e incluso conservar las plazas asignadas para formar especialistas", las de MIR.

"El problema de Cantabria no es tanto de insuficiencia de profesionales médicos como de un Gobierno incapaz de retenerlos", ha opinado Sáenz de Buruaga, que advierte que ya "no se puede esperar más" para tomar medidas ya que "la situación solo puede ir a peor y convertirse en insostenible".

Sin embargo, la dirigente del PP cántabro ha advertido que "no sirven las medidas aisladas ni los parches de última hora" o la "improvisación" sino que se precisa "planificación global" a través de este nuevo Plan de Ordenación de los Recursos Humanos que los populares reclamarán en el Parlamento a través de una proposición no de ley.

Sáenz de Buruaga ha explicado que en este Plan se debe abordar la determinación cuantitativa y cualitativa de efectivos; su adecuado sobredimensionamiento y distribución, de la estabilidad del empleo;

la movilidad geográfica y funcional; la política de jubilaciones; la promoción y desarrollo profesional, o la formación y capacitación para mejorar la calidad, eficacia y eficiencia de los servicios.

INFRAFINANCIACIÓN DE LA SANIDAD

Al margen de la cuestión de los recursos humanos, el PP cree que en la sanidad cántabra hay un problema de "infrafinanciación o falta de presupuesto suficiente".

Así, por ejemplo, ha afirmado que la partida de gasto farmacéutico, tanto vía receta como hospitalario, ha resultado "claramente insuficiente" y se ha agotado en su práctica totalidad en el mes de julio.

"Mucho nos tememos que el Gobierno está volviendo a las andadas ocultando facturas en los cajones", ha alertado la presidenta del PP, que ha recordado que cuando el PP llegó al Gobierno en 2011, donde estuvo hasta 2015, se encontró 80.000 facturas "escondidas e impagadas" a los proveedores farmacéuticos y material sanitario por valor de 261 millones.