Agentes de la Policía Foral, adscritos a la comisaría de en Estella, han detenido recientemente a un vecino de San Adrián, de 22 años y con antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de robo con fuerza de un ordenador portátil.

La investigación comenzó cuando un empleado del Hospital García Orcoyen interpuso denuncia por la sustracción de su ordenador portátil, valorado en 1.200 euros. Relató que lo había dejado cargando en un despacho cerrado y cuando fue a recogerlo ya no estaba. Además de aportar las características del ordenador informó que el dispositivo contaba con una aplicación de geolocalización instalada y que podía conocer en cada momento la ubicación aproximada donde se encontraba.

Con esos datos, una patrulla se desplazó hasta San Adrián, donde según la aplicación se encontraba el portátil. Los agentes lo localizaron en un domicilio, cuyo morador indicaba que lo había comprado en la calle a un desconocido por 200 euros. Los agentes recuperaron el aparato, lo devolvieron a su propietario y detuvieron al joven como presunto autor.

Las diligencias propias del atestado fueron remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Estella, que instruye la causa.