El conseller de la Presidencia, Jordi Turull, ha asegurado este martes que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, tiene la "voluntad" de acudir al Senado para explicar su rechazo a la aplicación del artículo 155 de la Constitución, pero ha puesto en duda que el PP lo quiera.

Tras la reunión de este martes del Govern, Turull ha explicado que, hasta que no se sepa "definitivamente el horario que se propone" para que Puigdemont comparezca en el Senado y "cómo se puede compatibilizar con el pleno del Parlament" previsto para el jueves, el presidente catalán no podrá confirmar su asistencia.

Turull ha señalado que "al principio" se les comunicó que la comparecencia de Puigdemont en el Senado podría ser el miércoles o "como muy tarde" el jueves al mediodía, pero "esto ha dado un vuelco" y puede que acabe siendo "materialmente" imposible.

Puigdemont tiene de plazo para presentar alegaciones en el Senado hasta el jueves a las 10 de la mañana, aunque para acudir a defenderlas personalmente tendrá que esperar a la comisión que se celebra esa misma tarde o al pleno del viernes.

Así ha quedado establecido en la sesión de constitución de la comisión de 27 senadores encargados de tramitar las medidas acordadas por el Gobierno al amparo del artículo 155 de la Constitución, que encabeza el presidente del Senado, Pío García Escudero. "Parece que nos lo quieren poner cada vez más difícil", ha afirmado Turull, antes de añadir: "Estamos empezando a deducir que no hay la voluntad de que esto sea posible".

Después de que el vicepresidente del Senado, Pedro Sanz, haya avanzado que si Puigdemont decide comparecer tendrá la oportunidad de debatir con el Gobierno, Turull ha remarcado que al Govern el debate no le da "ningún miedo", pero "primero dieron un calendario y en base a eso se convocó un pleno en el Parlament" para el jueves, y "ahora se cambian todos los horarios".

Si Puigdemont finalmente acude al Senado, ha explicado Turull, "intentará ir a hacer ver la bestialidad política que quieren perpetrar con este acuerdo y hacer pedagogía". Sobre la posición que debe adoptar como senador el expresidente de la Generalitat José Montilla en el pleno del viernes del Senado, en el que se prevé la aprobación de las medidas derivadas del 155, Turull ha evitado ser explícito.

"El Govern no es nadie para decir a los senadores qué tienen que hacer, pero en el relato de cómo hemos llegado hasta aquí, Montilla ya avisó a España de la desafección", ha subrayado.

En cuanto al pleno del viernes, se producirá la tramitación per se. Habrá un turno a favor y otro en contra (del dictamen), de 40 minutos cada uno. En caso de que el jueves no se pudiera dar el debate entre Puigdemont y Rajoy, el viernes habría una segunda oportunidad, según Sanz, aunque eso supondría que el president defendería sus alegaciones después de la aprobación del dictamen en comisión, y no antes.

A continuación, se emitirán los votos o enmiendas particulares y se defenderán dichos votos en la tribuna. Y después será el turno de los portavoces de los grupos, con 20 minutos de intervención cada uno y, en el caso de aquellos con grupo territorial, algunos más.

Sanz ha recordado, en todo caso, que lo votado en la Cámara el viernes no será un mandato, es decir, "el Senado no obliga al Gobierno a aplicar las medidas", ha aclarado, solo "lo autoriza". Por tanto, si el Ejecutivo decidiera no aplicar las medidas una vez aprobadas, podría hacerlo.

Cuando concluya el pleno del viernes, habrá otro, en el que se aprobará definitivamente el tratado CETA de libre comercio entre la UE y Canadá. Esto figuraba en el orden del día del pleno ordinario que se iba a celebrar esta semana y que ha quedado aplazado. Si se alarga la sesión, se continuará la semana próxima.

La comisión conjunta que se reunirá el jueves está presidida por el presidente del Senado, Pío García Escudero. Su vicepresidente primero es el senador del PP Juan José Imbroda y su vicepresidenta segunda, la socialista Luisa Carcedo.

Además, la Mesa de dicha comisión está integrada por el secretario primero, Juan José Lucas (PP), y el segundo, Francisco Menacho (PSOE). Este martes también se ha aprobado la creación de la ponencia que, dentro de dicha comisión, será la encargada de formular una propuesta de aplicación del 155, es decir, el dictamen que luego se debatirá y votará.

La ponencia estará integrada por tres senadores del PP, su portavoz José Manuel Barreiro, junto con Javier Arenas y Xabier Albiol; dos del PSOE, su portavoz Ander Gil y Luisa Carcedo; y uno de Unidos Podemos, Mirem Gorrochategui, así como un representante de cada uno de los otros grupos.