Así se ha pronunciado Barceló durante una interpelación presentada por el PP relativa a la política general del Govern en relación al Plan Juncker, en la que se ha solidarizado con los líderes de ANC y Òmnium, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, después de que una juez les haya enviado a la cárcel por un delito de sedición.

"Por desgracia, lo que les ha pasado a Cuixart y a Sánchez no es la primera vez que sucede en España, lo hemos visto con la persecución a sindicalistas en la última huelga general", ha añadido el vicepresidente.

Asimismo, en su intervención, Barceló ha explicado que en el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea se establece que la Unión "se fundamenta en los valores de respeto de la dignidad humana, libertad, democracia, igualdad, Estado de Derecho y respeto de los derechos humanos, incluidos los derechos de las personas pertenecientes a minorías" y que "la Unión tiene como finalidad promover la paz, sus valores y el bienestar de sus pueblos".

Por este motivo, ha defendido que la Comisión Europea es la institución que tiene que guardar los Tratados y que tiene la responsabilidad de garantizar que los estados miembros respeten la legislación de la UE.

"PAPEL DE FACILITADORES"

"Independientemente de la opinión política que tenga cada uno en relación al conflicto entre los gobiernos de Cataluña y de España, es perfectamente plausible que la Comisión Europea en particular, y las instituciones europeas en general, puedan jugar un papel de facilitadores para encontrar soluciones políticas dialogadas en la actual situación", ha manifestado.

Igualmente, ha sostenido que, a pesar de las intervenciones negativas que hasta ahora ha hecho el propio Juncker respecto a esta cuestión, "es muy probable que alguien ya esté haciendo este papel, de manera discreta, y esperamos que con éxito".

Barceló ha asegurado que ahora que se vuelven a tener "presos políticos" en España "se hace más necesario que nunca defender los valores y los principios democráticos".

"Que los señores del PP y el Gobierno de Mariano Rajoy continúen, hoy por hoy, obstinados a rechazar esta apuesta por el diálogo y los principios democráticos más elementales es una mala noticia para todo el mundo", ha lamentado el vicepresidente.