Pensada para ‘jugones' y jugadores casuales y sobre todo para crear adicción a través de los casi 400 modelos de móviles que actualmente están en el mercado. Así, nació hace cuatro años la idea de Unkasoft, un proyecto salmantino basado en el diseño de tecnología para ocio en teléfonos móviles que ya ha comenzado a dar sus primeros frutos en el mercado.

La iniciativa, que le ha valido a sus fundadores la concesión del Premio Neti por su idea como empresa de base tecnológica, ya ha comercializado dos videojuegos y está a punto de poner en circulación otros dos a lo largo de este verano.

Programadores, arquitectos de software, diseñadores gráficos, comerciales y personal muy joven exclusivamente dedicado a probar sus productos integra el equipo de esta joven empresa actualmente implantada en el vivero de la Cámara de Comercio de Salamanca.

Un equipo que ha sabido resolver uno de los retos del mercado de la telefonía móvil: dar con la herramienta necesaria para que todos los juegos lleguen al mayor número de modelos de teléfono, una creación que han bautizado como Battlewizard, con la que han conseguido que sus videojuegos lleguen a casi 300 tipos de terminal.

Más de un año de trabajo y una inversión de más de 30.000 euros permitió sacar al mercado el primer videojuego para móvil de los jóvenes empresarios, ‘El Cuarto Sello'.

Esta marca creará guiones para futuros juegos del equipo ya que la idea es que ‘El cuarto sello' se convierta en una "saga". Recientemente, Unkasoft ha diseñado una "adaptación para el público femenino" recogido por publicaciones como Cosmopolitan en la que el rodillo de pintura se sustituye por un lápiz de labios y los decorados laberínticos por playas.

A lo largo del verano verá la luz el tercer juego de Unkasoft, un proyecto de carácter educativo orientado a niños de entre 4 y 7 años.

En Salamanca

Los fundadores de la empresa asumen que este tipo de negocio es poco habitual en una capital como Salamanca, de hecho ellos han regresado a la capital charra después de años de trabajo en el extranjero no sólo por "morriña" sino también porque los costes de producción son menores y el apoyo institucional es mayor.

Sin embargo, la ubicación en la ciudad les ha enfrentado a la dificultad de encontrar personal con un alto nivel técnico, como arquitectos de software, ya que la mayoría son recién licenciados o personas que han optado por marcharse a otras ciudades más grandes.

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