Según han señalado desde el Consistorio en un comunicado, se da así cobertura a la necesidad básica de nutrición y se presta un servicio para personas mayores de 65 años y/o personas con discapacidades que les impidan preparar sus alimentos.

Las personas destinatarias de este servicio universal, que lo recibirán de manera prioritaria, serán aquellas que viven solas y no disponen de recursos familiares o económicos para atender esta necesidad.

Dentro del área de Servicios Sociales, el servicio de comida a domicilio ha seguido un procedimiento para abrir a contrato la prestación del servicio, ya que hasta ahora eran las trabajadoras familiares del área quienes lo cubrían, con alimentos preparados en el centro de día municipal Brot de Gínjol.

La oferta de menú se adaptará a las capacidades económicas, con un baremo suficientemente amplio como para garantizar la equidad y personalizar los casos.