De los cinco puertos que gestiona la APB, solamente Mahón ha disminuido su volumen de tráfico; concretamente, en un 10 por ciento respecto a los datos recogidos en junio de 2016. En el otro extremo, destaca el crecimiento del puerto de Alcúdia, con un aumento del 129 por ciento.

La cifra de tráfico de mercancía general -bienes de consumo- es de 6,2 millones de toneladas, un 7 por ciento más que en el mismo período de 2016. Alcúdia crece en un 23 por ciento, la Savina 11 por ciento, Ibiza un 8 por ciento y Palma un 6 por ciento. Mahón vuelve a ser el único puerto que no crece y disminuye un 15 por ciento su volumen de tráfico respecto a 2016.

En cuanto a graneles sólidos -carbón, grano, sal y materiales de construcción-, Mahón y Alcúdia aumentan su volumen de tráfico con un 58 por ciento y 35 por ciento mientras que Ibiza, la Savina y Palma disminuyen en un 43 por ciento, 33 por ciento y un 27 por ciento el tráfico de estos materiales en comparación con el ejercicio anterior.

Por último, los graneles líquidos -combustibles- muestran una subida en el volumen de tráfico: los puertos de Palma y Alcúdia crecen un 11 por ciento cada uno y el de Ibiza aumenta un 3 por ciento mientas que los puertos de Mahón y la Savina se mantienen respecto al volumen de tráfico del pasado ejercicio.

LOS PASAJEROS TAMBIÉN CRECEN

Finalmente, el tráfico de pasajeros de líneas regulares y de cruceros también ha experimentado un crecimiento del 8 por ciento y del 4 por ciento respectivamente.

En este sentido, cabe destacar la actividad crucerística del puerto de Mahón, que ha crecido en un 120 por ciento con 52.888 pasajeros de enero a junio de este ejercicio, y la bajada del 4 por ciento del puerto de Palma.