El primer paso propuesto por los diputados Guzmán Ahumada y Teresa Sánchez es hacer un inventario durante este año de los parques infantiles que existen en los municipios más pequeños, para lo cual se necesitará la colaboración de los ayuntamientos, instándoles a que incluyan un estudio sobre la accesibilidad e inclusividad en los mismos. Desde IU aconsejan que estos informes se realicen junto a colectivos especializados en el ámbito de la diversidad funcional.

Los diputados han solicitado que a partir de 2018, y dentro del Plan de Inversiones Cofinanciadas, se destinen 500.000 euros para la puesta en marcha de una línea específica para garantizar la accesibilidad e inclusividad de los parques infantiles de los municipios menores de 20.000 habitantes, exclusivamente para la eliminación de barreras arquitectónicas, la adecuación y la instalación de aparatos adaptados. También se insta a la Junta de Andalucía a participar en el plan, colaborando económicamente en el mismo.

Así, han recalcado que las administraciones están obligadas a garantizar que niños y adolescentes con algún tipo de discapacidad disfruten de una vida llena "que les permita valerse por sí mismos y facilite la participación activa en la comunidad".

"Si queremos una ciudad inclusiva, tenemos que empezar por formar niños inclusivos dentro y fuera de la escuela, y esto implica que todos jueguen unidos y mezclados. Estos espacios deben servir para inculcar valores y educar en la diversidad al resto de niños", han sostenido.

Eso permitirá también, han recalcado, "divertirse juntos y colaborar con ellos cuando lo necesiten", además de "romper tabús y estereotipos entre los mayores", han manifestado. Por ello, esta mejora de la accesibilidad en estos parques permite concienciar a la sociedad "y también a los gestores públicos sobre la necesidad de la accesibilidad universal y el diseño para todos".

PARQUES INCLUSIVOS

Así, han recordado que en los últimos años no sólo los ayuntamientos comienzan a hacer más accesibles e inclusivos los parque infantiles y sus juegos, sino que también los están instalando otro tipo de establecimientos como colegios, comunidades de vecinos y empresas privadas.

Según los diputados, aunque exista una determinada normativa, apenas hay alguna que recomiende cómo debe ser un parque infantil accesible, inclusivo y seguro, siendo por tanto ésta una tarea pendiente, así como la de los elementos que deberían componerlos y en los que la integración de los juegos habituales con juegos accesibles y adaptados para niños con alguna discapacidad sea el objetivo principal con el fin de que todos puedan disfrutar y divertirse juntos.

"Debería existir una serie de directrices sobre cuáles deberían ser los criterios para considerar un parque infantil como accesible, inclusivo y seguro para sus usuarios", han incidido, añadiendo que la eliminación o reducción al máximo de las barreras arquitectónicas es fundamental.

Un escalón en la entrada o la arena del suelo son obstáculos "difíciles de superar, más cuando se tiene que tener como principio que en todas las actividades relacionadas con los niños con diversidad funcional se ha de tener como consideración primordial la protección de su interés superior".

También apuestan por una ampliación del número de plazas de aparcamiento para personas con diversidad funcional en lugares lo más próximos posibles a estos parques infantiles, así como la instalación, en su caso, de paradas de transporte público lo más cercanas a ellos. Además, el mantenimiento de estas zonas es un punto clave, dado que puede haber juegos inclusivos que estén descuidados y dañados.

Respecto a la seguridad, han añadido los diputados en la moción aprobada, deberían contar con unas medidas mínimas, al menos y como ejemplo: que estén separados suficientemente del tráfico rodado bien de manera natural o artificial; que la superficie sobre la que vayan a jugar este realizada de materiales blandos con el fin de evitar posibles lesiones ante caídas; que los dispositivos de juego estén diseñados y producidos con materiales que no puedan causar daño a los menores; o que tengan información próxima y visible para llamar a un servicio médico próximo en caso de necesidad.