El cantante Pablo Alborán explicó anoche en el programa El Hormiguero el porqué del parón de cerca de dos años que ha hecho en su carrera, al menos en lo que a conciertos y exposición mediática se refiere.

En diciembre de 2015 el cantautor aseguraba que era momento de "parar" para poder retomar su vida, pues la fama y el trabajo le llevaron a perder su "normalidad" y a alejarse de su familia y sus amigos.

Anoche Alborán le confesaba a Pablo Motos que llegó un momento en el que sencillamente no podía más. "Un día, al acabar un concierto, en los bises, me di media vuelta y pensé que quería irme a casa. Necesitaba desconectar", contaba el artista.

Se había alejado de los suyos, como quedó patente en una conversación que tuvo con su hermano: "Me dijo que hacía siete años había explotado todo y yo había desaparecido. Yo seguí mi sueño y no me di cuenta de que había personas que me estaban esperando", reflexionaba Alborán.

"Mi peor enemigo he sido yo mismo, necesitaba hacer un impasse", confesaba Pablo Alborán, que saltó a la fama en 2010 y desde entonces no había parado en ningún instante, dando a luz tres álbumes de estudio y uno en vivo.

Con Solamente tú alcanzó el primer puesto en su primera semana en ventas y cosechó más de 30 discos de platino en Europa, 23 de ellos conseguidos en 24 meses, y dos de oro en América. Todo eso, en términos de fama y trabajo, pasa factura.

En estos casi dos años ha vuelto "a estudiar música, a estar en casa, con mis amigos de toda la vida y encontrar la normalidad" y ha tenido tiempo de componer su nuevo álbum, de forma que "estaba tan a gusto grabando el disco que cuando acabé no tenía ganas de sacarlo".

Ahora ha regresado con dos singles de su nuevo álbum, Saturno y No vaya a ser, aunque el disco al completo no estará disponible hasta noviembre. "Tenía la obsesión de contar las cosas de distinta manera. Esta vez he buscado hacer letras que no solo encajen con una música sino que también sean agradables de leer", aseguraba el actor en la presentación de ambos temas.