En un comunicado conjunto, las organizaciones sindicales han asegurado que muchos de estos empleados tienen sueldos por debajo de 1.000 euros y que no están cobrando antigüedad.

En este sentido, los sindicatos han criticado que el Govern recurre "automáticamente" las sentencias favorables a reconocer la antigüedad de los trabajadores "con el fin de demorar el pago".

También sostienen que hay contratos de obra y servicio en fraude de ley, que existen diferencias salariales entre trabajadores que realizan las mismas funciones o que no se reconocen las categorías adecuadas a los trabajos realizados.

"Cuando un Govern hace declaraciones favorables a la equidad entre trabajadores o el aumento de sueldo en colectivos con situaciones salariales deplorables, no comprenderemos cómo las empresas que tiene bajo su amparo permite situaciones sangrantes y además las potencie actuando mucho peor que los empresarios a los cuales denuncia en sus declaraciones", han protestado.

Así, CCOO, UGT y USO han censurado que el Govern "en lugar de dignificar el empleo público y homogeneizar a sus trabajadores, lo convierte en empleo precario y trata de perpetuarlo de tal forma con la oposición total de los representantes de los trabajadores".

Por todo ello, los sindicatos han convocado paros en la empresa "después de años" en los que el Govern, según han señalado, se ha "cerrado a negociar".