En esta edición, la organización ha ampliado en 150 las inscripciones con respecto a la edición anterior y se han agotado todas las plazas dos meses antes de la disputa de la prueba.

En la prueba de 2017, un 85 por ciento de los participantes de la prueba son extranjeros y se espera representación de 32 nacionalidades diferentes. El impacto económico estimado será cercano a los 2 millones de euros ya que se confía durante la semana del evento en la presencia de más de 3.000 visitantes entre familiares y triatletas, según ha informado el Ayuntamiento de Calvià en un comunicado.

La prueba internacional, se iniciará en la Playa de Torà con un recorrido de 1,9 km por las aguas de la Bahía de Peguera. La siguiente fase, es el circuito de ciclismo, compuesto de dos vueltas de 45 kilómetros, que combina montaña, paisajes naturales cerca de la Serra de Tramuntana, pueblos y costa. La última fase es la carrera a pie de 21 km que consiste en 4 vueltas por un circuito que alterna el boulevard de Peguera y sus paseos de playa.

El objetivo de la organización es que los participantes y sus familiares puedan "disfrutar de un evento que vamás allá de una competición deportiva de alto nivel" y para ello se ha preparado un programa de actividades que incluye diferentes propuestas relacionadas con la cultura, la música y la gastronomía del lugar, entre otras.