La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) se manifiesta por octava vez en las calles de Madrid para exigir la ilegalización de ANV y el Partido Comunista de las Tierras Vascas, así como la revocación de la resolución del Congreso que permite al Gobierno dialogar con la organización terrorista ETA si se cumplen determinadas condiciones.

La manifestación, para la que la asociación espera una gran asistencia, partirá a las 17.00 horas de la madrileña plaza del Pintor Sorolla y recorrerá las calles de Santa Engracia y Génova hasta Colón.

La marcha llevará dos pancartas con los lemas 'Un futuro en libertad' y 'Juntos derrotemos a ETA' y contará con el apoyo de una veintena de asociaciones de víctimas del terrorismo y de plataformas ciudadanas como el Foro de Ermua, la Fundación Miguel Angel Blanco, la Fundación Gregorio Ordóñez y Peones Negros.

Apoyo del PP

Aunque el PP también respalda la manifestación, no asistirá su presidente, Mariano Rajoy, ni el ex jefe del Ejecutivo José María Aznar, ni tampoco el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que han alegado compromisos políticos.

Sí han confirmado su presencia el secretario general del partido, Angel Acebes, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, el ex ministro del Interior Jaime Mayor Oreja, la presidenta del PP vasco, María San Gil, el portavoz parlamentario del Grupo Popular, Eduarzo Zaplana, y el presidente del PP de Catalunya, Daniel Sirera, entre otros.

También secundan esta movilización Unidad, Progreso y Democracia, el partido liderado por la ex socialista Rosa Díez; y Partido de la Ciudadanía, que estará representado por su presidente, Albert Rivera.

Reproches del PSOE

Por su parte, la vicepresidenta y portavoz del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha tachado de "espectáculo" la actitud del PP respecto a la manifestación.

Además, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, ha considerado que el PP tiene "mala conciencia" porque sabe que la manifestación convocada por la AVT, a la que acudirán algunos de sus dirigentes, tiene "propósitos oscuros" y "compañías poco recomendables".