La orden de suspensión del riego con agua no potable para los jardines y zonas verdes de las ciudades ubicadas en los ríos Carrión, Pisuerga y parte del Duero implicará que el Ayuntamiento de Valladolid no pueda disponer de este fluido para atender al 72 por ciento de las en torno a 300 hectáreas de superficie vegetal en la ciudad, lo que, según la concejal de Medio Ambiente y Sostenibilidad, María Sánchez, podría causar daños en estos espacios.

Sánchez, acompañada por el teniente de alcalde y concejal de Urbanismo, Manuel Saravia, ha explicado que tras la reunión de la Comisión Permanente de la Sequía de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha quedado suspendido, a partir de este miércoles, el riego de jardines y zonas verdes en poblaciones ubicadas a la orilla del Carrión, Pisuerga y el Duero, aguas abajo de la desembocadura del río que atraviesa la capital vallisoletana.

En el caso de la ciudad, María Sánchez ha explicado que la restricción afecta a dos de las cuatro tomas de agua que se utilizan, las de Pisuerga y Canal de Castilla, y que abastecen a un total de 216 hectáreas de las en torno a 300 de superficie verde que existen en Valladolid. Sólo quedan exentas las zonas que se riegan con caudal procedente del Canal del Duero o del Esgueva y las que se abastecen de agua potable -el 20 por ciento del total-.

De esta manera, sólo se podrá regar en las zonas verdes situadas en el este de Valladolid, así como en algunas alejadas de las tomas de riego para las que se emplea agua potable, en las que como ha recalcado la concejal el Ayuntamiento será "más responsable". En todo caso, Sánchez ha explicado que la CHD ha "garantizado" el agua potable para consumo ciudadano.

La edil de Medio Ambiente ha precisado que, desde que el pasado mes de abril cuando la CHD ya advirtió de que la campaña de riego podría estar afectada por la sequía el Ayuntamiento de Valladolid ya sólo regaba las zonas verdes en días alternos.

Estarán afectados por la medida, por ejemplo, espacios como el Campo Grande, Las Moreras, Ribera de Castilla, el barrio de Parquesol o el Cerro de las Contiendas.

EXCEPCIONES

No obstante, Sánchez ha explicado que, en la reunión mantenida este jueves con el Comisario de Aguas de la CHD el Ayuntamiento ha obtenido el permiso del Organismo de cuenca para regar en dos excepciones. La primera será durante las próximas Fiestas de la Virgen de San Lorenzo en lugares como Las Moreras, donde el agua, además de para regar tiene función higiénica y de limpieza.

La segunda excepción admitida sería el caso de que se detecten zonas demasiado secas en las que podría existir riesgo de incendio.

La suspensión del riego con agua no potable en las citadas zonas se mantendrá "hasta que cese esta sequía tan prolongada" y, cuando se levante, María Sánchez ha apuntado que el Área de Medio Ambiente valorará los daños que podrían producirse, ya que las zonas en las que no se pueda emplear agua "se resentirán de forma importante", ha advertido la edil de Valladolid Toma la Palabra.

Sánchez ha lamentado que con esta medida se perjudique a ayuntamientos como el de Valladolid que emplean principalmente agua no potable para el riego, una acción que el equipo de Gobierno considera medioambientalmente "más adecuada" pero ahora ven cómo se favorece a las ciudades que utilizan líquido potable.