Agentes de la Guardia Civil reanimaron el pasado miércoles a un niño de dos años mientras lo trasladaban al hospital tras ser atropellado involuntariamente por un familiar en una finca de Cieza, según han informado fuentes del Instituto Armado.

Los hechos tuvieron lugar sobre el mediodía del miércoles, cuando una patrulla la Guardia Civil fue alertada por un hombre que salió del camino de entrada a una finca colindante a la carretera y les pidió que le ayudaran porque, al parecer, había atropellado involuntariamente a su sobrino, de corta edad, en el interior de la finca y que el niño se encontraba inconsciente.

Tras el hombre apareció una mujer joven, en avanzado estado de gestación, que llevaba en brazos a un niño de dos años, que sangraba por varias zonas de su cuerpo y había perdido el conocimiento.

Debido la gravedad de la situación y la cercanía al hospital de La Vega Lorenzo Guirao de Cieza, la patrulla de la Agrupación de Tráfico decidió trasladarlo inmediatamente en el propio vehículo oficial, junto con la madre, hasta el centro asistencial.

Durante el trayecto, el niño dejó de respirar, por lo que uno de los agentes de la Benemérita, tras comprobar las constantes vitales, inició las maniobras de reanimación cardio-respiratorias, consiguiendo poco después que el niño arrancara a llorar y recuperara las conciencia minutos antes de la llegada al centro hospitalario.

El menor fue asistido en primera instancia en centro hospitalario de Cieza, y posteriormente fue trasladado al Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca de Murcia, donde quedó ingresado en observación con heridas de diversa consideración.