Según informa la Comisaría Provincial en una nota, la investigación se inició a raíz de la denuncia formulada en la Comisaría por una mujer que fue víctima de la sustracción de su cartera mientras se encontraba en una habitación del Hospital acompañando a su padre que estaba enfermo.

Fruto de las gestiones realizadas por los investigadores, descubrieron que uno de los celadores del hospital contaba con antecedentes por hechos similares, por lo cual las pesquisas se centraron en torno a esta persona.

Días mas tarde se recibió una llamada informando que se había producido el hurto de tres teléfonos móviles, una cartera y dinero en efectivos a diferentes trabajadores del hospital, así como a familiares de enfermos que se encontraban en el mismo.

Así, los investigadores se desplazaron hasta el centro sanitario para

entrevistarse con la persona responsable de la seguridad del mismo y ante las sospechas fundadas sobre el presunto autor de los hechos, se localizó al celador, que tras ser sometido a un cacheo superficial, se le encontró

escondido entre su cuerpo dos de los teléfonos móviles que habían sido sustraído esa misma mañana.

Por estos hechos se procedió a su detención, reconociendo de inmediato esta persona ser el autor de todos los hurtos que se habían producido en el Hospital de La Línea.

ROBO EN HOTEL

Por otra parte, la Policía Nacional ha detenido también a dos personas, un hombre y una mujer, como presuntos responsables de los hurtos y robos perpetrados en un hotel de La Línea.

Según ha explicado la Policía, los detenidos fueron localizados por

un indicativo de la Brigada de Seguridad Ciudadana tras recibir la Sala Operativa del 091 una llamada indicando que unos clientes habían abandonado de madrugada un hotel con una maleta de grandes dimensiones, mostrando una actitud sospechosa.

Los agentes desplazados hasta el lugar se entrevistaron con el recepcionista del hotel, el cual les facilitó la descripción de las personas para posteriormente realizar una patrulla por la zona, siendo descubiertos en las inmediaciones del hotel.

Los sospechosos portaban una maleta en cuyo interior se hallaron un cartón de tabaco y una televisión de 32 pulgadas, que fue reconocida por el empleado del hotel como propiedad del establecimiento.

Ante los testimonios aportados por los clientes del hotel que habían sido víctimas de la sustracción en su habitación de dos cartones de tabaco, unas planchas de pelo, dos neceseres, un perfume y varias piezas de maquillaje, además de faltar la televisión de la habitación, se procedió a realizar un registro de la habitación donde se hospedaban los detenidos, localizando debajo de la cama todos los objetos sustraídos.