Homenaje sin palabras al padre de la risoterapia. En la Inglaterra del siglo XVIII, algunos médicos recetaban las actuaciones de David Garrick a los pacientes que sufrían depresión. Este actor teatral estaba tan dotado para la comedia que, sin saberlo, fue el primer risoterapeuta de la historia.

Eso piensan, al menos, los componentes de Tricicle, que se proclaman «humildes seguidores» de Garrick. Por eso le han puesto su nombre a este espectáculo, con el que buscan que el espectador «se lance a reír con esos 400 músculos que tienen que moverse para morirse de risa».

¿Su receta? La de los últimos 28 años: una hilarante mezcla de cine mudo, clown, mimo y teatro convencional.

* Teatro Gran Vía: Gran Vía, 66. 20.30 h. De 20 a 34 euros.