Muchas familias recurren a las residencias para internar a sus mayores, ante la imposibilidad de hacerse cargo de ellos. Pero esta alternativa no es sencilla ni tampoco económica. No en vano se calcula que 17.000 ancianos de la región están en lista de espera para ser admitidos en una residencia pública (la Comunidad gestiona 119). Algunos optan por los centros privados.
Según un estudio de la revista Consumer del grupo Eroski, en España sólo hay 3,5 plazas para cada 100 mayores de 65 años. Los precios, sin embargo, no son asequibles: la cuota mensual media de un centro público para un residente no dependiente en habitación compartida es de 956 euros, un 33% más que hace cinco años. Los madrileños creen que estos centros están «bien», si se valoran aspectos como las infraestructuras, los servicios o la atención asistencial.
Más económicas
Este estudio, realizado entre 8.448 usuarios de toda España, determina que las residencias públicas son más económicas y obtienen una mejor calificación (7,3 puntos) que las privadas (6,9) y que las concertadas (7).
El talón de Aquiles de estos centros son las infraestructuras, en especial en los privados: en éstos sólo el 46% tiene baño completo en las habitaciones, menos de la mitad dispone de camas articuladas y el 44% carece de sala de rehabilitación.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios