La coordinadora de En Marea ha requerido a sus diputados en el Congreso que "reconsideren" la negativa avanzada por cuatro de estos cinco parlamentarios y acudan al plenario del sábado a "rendir cuentas" sobre un trabajo que considera "positivo y fructífero".

Lo han dicho Ana Seijas y Gonzalo Rodríguez, dos miembros de la dirección de En Marea que han comparecido en rueda de prensa para dar a conocer la organización de la asamblea y su lema, 'A suma do común' ('La suma de lo común').

En ese foro, ambos han recordado que los parlamentarios autonómicos sí acudirán para informar de labor en O Hórreo y han subrayado que a esa rendición de cuentas obliga el reglamento de la formación rupturista.

Por tanto, Gonzalo Rodríguez ha reclamado a los diputados que "reconsideren" su decisión y "hagan el esfuerzo" de acudir a la cita del sábado, mientras Ana Seijas ha apuntado que si alguno no puede "estar presente", al menos lo haga la mayoría del grupo.

El bloque de 'rendición de cuentas' supone el arranque del plenario, que se celebrará en el Palacio de Congresos de Santiago, e incluye a los representantes en Cortes y en el Parlamento de Galicia, así como a los miembros del Consello das Mareas.

¿PORTAVOCÍA ROTATORIA?

En paralelo, Ana Seijas ha informado de que hay "muy pocas" enmiendas que no hayan sido aceptadas, un filtro que sí ha pasado la propuesta de los críticos de convertir la portavocía en tres y de que sea de carácter rotatorio cada seis meses.

Se someterá por tanto al debate del plenario, si bien la propia Seijas le ha restado importancia por entender que actualmente ya existen dos viceportavoces acompañando a Luís Villares tanto a nivel orgánico como parlamentario.

Con esos "cinco portavoces", la pluralidad a entender de Gonzalo Rodríguez, ya está "claramente lograda"; al menos, más que en cualquier otro grupo que él "conozca".

Y, en cuanto a rotar el puesto cada medio año, Seijas ha agregado que "se puede debatir" y ha augurado que no supondrá "mayores problemas" para lograr "entendimiento". Y es que actualmente, tal y como ha dicho, ya se está "trabajando de forma colegiada".

Ese asunto se abordará el sábado por la tarde, dentro un bloque que abarca los reglamentos internos del Consello das Mareas y de la coordinadora, así como la relación con las mareas municipalistas y las aportaciones económicas de los cargos públicos.

También sobre estas cuestiones existe debate interno. El sector oficial aboga por regular la interacción con los órganos locales, algo que los críticos rechazan; y por introducir una cláusula para aumentar el sueldo a quienes pierden dinero como consecuencia de su entrada en política, que tampoco cuenta con el visto bueno de 'Recuperar En Marea', que abre la puerta, no obstante, a cobrar por cargos orgánicos.

MODELO DE PARTIDO

El modelo de partido de En Marea irá en el segundo de los tres bloques, en el que también se fijará la postura de la formación rupturista en aspectos como la maternidad subrogada, la financiación autonómica y las infraestructuras.

Las enmiendas de los críticos, que han obtenido el apoyo del histórico nacionalista Xosé Manuel Beiras, buscan frenar "la moderación del discurso" e impedir que En Marea sea "un partido clásico".

Al respecto de ésta y otras aportaciones, Ana Seijas ha opinado que esta formación "no" es "un partido clásico", sino más bien "un espacio político" en el que "los matices hacen crecer la organización". Son, ha opinado de todos modos, "pequeños matices" en la mayoría de los casos.

2.400 INSCRITOS

Por otra parte, Gonzalo Rodríguez ha destacado que en las últimas fechas se han inscrito 200 personas para participar en el plenario, de modo que son 2.400 las que pueden asistir.

Ha atribuido este incremento al "debate abierto y plural" que mantiene el partido internamente y que "anima a la participación" buscando conformar una "alternativa" a las políticas "neoliberales" en el gobierno.

Además, Rodríguez ha expresado su confianza en que tras la cita del sábado se continúe trabajando en un proyecto "colectivo" que vaya "aboliendo" ese "mal característico de la izquierda que tradicionalmente fue la fragmentación".

El objetivo de la actual dirección, ha mantenido, es quedarse con lo que "une" a todas las partes implicadas y "abrir debates plurales" que permitan "construir". "Con el énfasis en lo colectivo", ha recalcado.