Más de 4.000 personas, en su mayoría entre los 18 y 30 años, realizaron la prueba en la campaña del año pasado de este programa, denominado 'PrebenJaia', según ha informado este lunes el Gobierno foral en un comunicado.

La iniciativa está dirigida, principalmente, a las personas jóvenes. La campaña de 2017, que comenzó el mes de mayo en Maeztu, recorrerá localidades como Villanueva de Valdegovía, Labastida, Nanclares de la Oca, Salvatierra/Agurain, Legutio y Murgia, entre otras, y finalizará en octubre en Izarra.

Este programa se concibe como una acción de información, sensibilización, prevención y reducción de riesgos asociados con el consumo abusivo de bebidas alcohólicas en espacios festivos.

Para su ejecución, se aprovecha la celebración de fiestas locales o eventos generales en los que se prevé una gran asistencia de personas. El Gobierno foral instalará carpas informativas, atendidas por monitores, en las que las personas que lo deseen podrán someterse a pruebas de alcoholemia.

En estos espacios se informará a las personas sobre los riesgos del consumo abusivo de alcohol, así como el peligro que implica consumir drogas y alcohol para los conductores.

La intervenciones informativas de la campaña 2017 se desarrollarán mayoritariamente en horario nocturno, entre la medianoche y las 03.30 horas, salvo la de la Fiesta de la Vendimia de Yécora, en las que que se realizarán en horario diurno.

CONCIENCIACIÓN

Además de la realización de las pruebas, a las personas que arrojen tasas superiores a la legalmente permitida, se les distribuirá de manera gratuita un test de detección de alcohol, con el fin de concienciar sobre los usos responsables y la prevención de accidentes, entre quienes pretendan regresar en vehículo particular a sus puntos de origen.

El año pasado, más de 4.000 personas, mayoritariamente hombres (63'4%), participaron en la iniciativa. El perfil de edad más presente fue el comprendido entre los 18 y los 20 años (casi uno de cada cuatro), seguido por los rangos de edad de 21 a 25 años, y de 26 a 30 años.

En cuanto al índice de presencia de alcohol en sangre superior a las tasas legalmente permitidas, cerca de la mitad (47%) dio positivo. Una de cada tres personas que se acercó a los puntos informativos reconoció que tenía intención de conducir. El 65% de los conductores estaba en condiciones de coger un vehículo.