La Guardia Civil ha descubierto una organización clandestina formada por marroquíes y españoles que introducía drogas en Ceuta a través de las alcantarillas del perímetro fronterizo terrestre que separa la ciudad y Marruecos.

Según informaron fuentes policiales, el hallazgo se ha producido tras la detención de un ceutí que se encontraba en el perímetro con 28 kilos de resina de hachís que habían sido introducidos por la alcantarilla.

La droga había sido suministrada desde Marruecos por dos marroquíes, detectándose el pase mediante las cámaras térmicas de seguridad que están instaladas en los 8,2 kilómetros de frontera terrestre.

Los dos marroquíes consiguieron darse a la fuga mientras que el ceutí fue detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública.

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