Así lo ha confirmado este jueves el delegado territorial de la Junta en Segovia, Javier López-Escobar, que se ha referido a un ejemplo de incendio que "aparece en los manuales, pero que rara vez se ve", porque puede resultar difícil de creer que un cristal "abandonado" en el monte o almacenado puede originar un incendio, según ha agregado.

Por el momento se mantiene el nivel 2 para un fuego que ha devorado ya 400 hectáreas de superficie arbolada, fundamentalmente pinar, al norte del casco urbano de Navalilla.

López-Escobar ha recalcado que la población de esa localidad no corre peligro y tampoco las de Cobos de Fuentidueña o San Miguel de Bernuy, a pesar de los desalojos de la tarde del miércoles, que se realizaron por "prudencia".

El delegado, que se ha desplazado este jueves hasta el lugar del incendio, ha lamentado el viento reinante en la zona y la escasa aparición de la lluvia. Asimismo, ha recordado las características especiales de esta campaña, con sequía y altas temperaturas, lo que convierte a "todo el monte" en "combustible".

Entre la superficie arrasada, gran parte pertenece a monte público, del que es titular la Comunidad de Villa y Tierra de Fuentidueña, lo que ocasiona que estuviera "muy bien cuidado", según López-Escobar.

Asimismo, el delegado territorial ha descartado que el territorio del Parque Natural de las Hoces del Duratón se haya visto comprometido. El fuego ha avanzado en todo momento al norte de Navalilla, mientras que esa zona protegida se ubica al este de esa localidad. Además, la "lengua" del incendio ha sido "muy estrecha", aunque de progresión veloz, como ha indicado López-Escobar.