Para ello, han instalado una carpa en el paseo marítimo, frente al Hotel Vinci, donde a las 11.00 horas han comenzado sus actividades, contando con la presencia de la concejala de Playas, Teresa Porras; el presidente de la junta provincial de la AECC en Málaga, Francisco Aguilar; y el delegado del laboratorio La Roche Posay, José Antonio Muñoz, que colabora con muestras gratuitas.

El objetivo de esta campaña es concienciar a la población de que el principal factor de riesgo del cáncer de piel es una sobreexposición a la radiación ultravioleta y que puede ser evitado. Los datos que aporta la AECC avalan la "urgencia" de toma de conciencia de la población para prevenir el cáncer de piel, el más frecuente en mayores de 50 años, pero que cada vez se diagnostica más en personas jóvenes por hábitos poco saludables de exposición solar.

En los últimos 25 años, la incidencia en cáncer de piel se ha incrementado a nivel mundial. En España ha aumentado un 38 por ciento en los últimos cuatro años y se prevé que seguirá esa tendencia en las siguientes dos o tres décadas. Cada año se diagnostican algo más de 5.000 nuevos casos, 2.286 en hombres y 2.718 en mujeres. Pese a estas cifras, el cáncer de piel se puede prevenir.

La incidencia en nuestro país se puede considerar "alta", según han señalado desde la AECC, por lo que es especialmente importante proteger a niños y adolescentes. Se estima que uno de cada 100 jóvenes de ahora tendrán cáncer de piel cuando sean adultos.

Las personas que viven en áreas donde están expuestas todo el año a una luz solar intensa tienen mayor riesgo. En el caso de Málaga, donde se disfrutan algo más de 3.000 horas de sol al año, es de gran importancia la prevención.

Entre las recomendaciones para prevenir el daño a la piel y minimizar la exposición al sol, la AECC recomienda usar prendas protectoras como camisetas y sombreros, evitar la exposición en horas centrales del día, aplicar protector solar también durante el invierno o días nublados, usar gafas de sol que absorban el 100 por cien de la radiación ultravioleta, beber abundante agua, evitar otras fuentes de luz ultravioleta como lámparas bronceadoras, examinarse periódicamente los lunares y consultar con el médico cualquier lesión de nueva aparición.

Para que los protectores solares sean efectivos, deben usarse los adecuados a las características físicas (fototipo) y que contengan filtros ante rayos UVA y UVB; usar la cantidad suficiente, cubriendo toda la superficie corporal; aplicar productos con la piel seca; realizar la primera aplicación al menos 30 minutos antes de exponerse al sol; reponer el foto protector después de cada baño de más de 20 minutos o cada dos horas; y emplear fotoprotectores resistentes al agua.