Según ha informado ARCA en una nota de prensa, el Ayuntamiento ha llevado a cabo una inspección y ha determinado que no hay licencia para las obras.

Como ha indicado ARCA, éste es un elemento precatalogado que tenía una suspensión de otorgamiento de licencia en el momento en el que se llevaron a cabo las obras.

El Ayuntamiento ha comunicado a ARCA que abrirá un expediente de infracción. La entidad considera que los hechos son "muy graves" porque se trata de "un elemento de valor cultural" que pasará a formar parte del próximo catálogo de patrimonio de Palma, y porque "se han llevado a cabo unas obras sobré un bien cultural, sobre el cual

había una suspensión de licencia".

ARCA también ha recalcado que la intervención "provoca un daño estético a un elemento patrimonial singular" y creen que éste "tendría que estar exento de publicidad". Además, "provoca un impacto visual y paisajístico desde gran distancia", han criticado desde la asociación.

"No sólo es la chimenea, sino también el edificio anexo, que provoca una agresión visual exagerada, desproporcionada y que echa a perder al paisaje de la zona. Por este motivo, pedimos que no se demore la retirada de estos elementos de iluminación que echan a perder a un entorno de alto valor agrícola", han solicitado.

Según ha recordado ARCA, el edificio de la factoría se construyó a finales del verano de 1940 y en 1998 empezó el proceso de reconversión en el actual complejo industrial-comercial, por lo que todo su recinto se transformó. "La esbelta chimenea es el único vestigio que queda de esta emblemática fábrica", han lamentado desde ARCA.