El Ayuntamiento de Villamanrique de la Condesa (Sevilla), gobernado por José Solís (PSOE), solicitará a la Junta de Andalucía medidas de apoyo y de prevención de cara al próximo curso escolar, para implantar un servicio de mediación y traducción en las aulas e integrar a los alumnos inmigrantes procedentes de Rumanía, en el caso de que vinieran acompañados de sus familias.

La solicitud del Consistorio surge después de que el pasado 23 de mayo, la Policía Nacional Adscrita a la Junta de Andalucía y la Guardia Civil rescatasen a tres menores localizados en una vivienda del municipio, dentro de una habitación cerrada con una cadena. Mientras estos menores no estaban escolarizados ni sometidos a los correspondientes seguimientos médicos, la actuación policial derivaba de las denuncias iniciales de los servicios sociales municipales, ante la situación de diversas familias de la Europa del Este llegadas al pueblo para faenar en el campo e instaladas en viviendas a las que no les une título alguno.

Estos menores, "solían deambular solos por la localidad sin la compañía y el control de sus progenitores o familiares mayores de edad", según la Consejería de Justicia e Interior.

Precisamente en ese sentido, y según informa el Ayuntamiento de Villamanrique, la valoración realizada por la Comisión de Absentismo del municipio, integrada por directores de centros, psicólogos, educadores, la Policía Local, el inspector de zona de la Consejería de Educación y un representante municipal, ha considerado que "este fenómeno (el abstentismo escolar) se produce de forma muy puntual y es estacional, al estar relacionado con la presencia de las familias en las campañas agrícolas".

"En Villamanrique no hay absentismo escolar. El absentismo que hemos detectado está relacionado, prácticamente, con la desestructuración de familias inmigrantes", asegura Miguel Prieto, concejal de Igualdad, Salud y Asuntos Sociales del Ayuntamiento manriqueño.

No obstante, y como medida preventiva, el propio edil ha manifestado su deseo de incorporar este nuevo servicio solicitado a la Junta de Andalucía, con el fin de integrar plenamente a los alumnos extranjeros para que no queden excluidos del sistema educativo. "Nuestro objetivo es la prevención y, por supuesto, que no haya barreras idiomáticas entre los alumnos", prosigue Prieto. En el pasado curso escolar 2016-2017, de hecho, fueron escolarizados en el municipio unos 20 menores rumanos desde Educación Infantil a la ESO.