De esta manera, el agente estaba con su familia en el paseo marítimo cuando observó al varón corriendo con una mochila y a varias personas, entre ellas la mujer propietaria del objeto, tras él, por lo que inmediatamente su sumó a la persecución.

Así, pudo alcanzar al ladrón y proceder a su detención, a la par que avisaba a la Sala de Coordinación de la Guardia Civil para que una patrulla acudiese al lugar, acudiendo de inmediato una pareja de la Policía Local de Tías, que se hizo cargo de las primeras diligencias por hurto.

El guardia civil, antes de la llegada de la Policía Local, tuvo que proteger al detenido de las otras personas que iban en su persecución con la supuesta intención de agredirle físicamente, por lo que tuvo que identificarse como agente y calmar la situación.

La víctima del hurto, una turista de nacionalidad extranjera, pudo recuperar la mochila en principio sustraída, pasando el detenido a disposición del correspondiente Juzgado, en funciones de guardia, de Arrecife.