La investigación se inició con la denuncia interpuesta por un empresario de Palencia, el cual, en octubre del año 2016, compró siete contenedores de reciclaje a una empresa gijonesa, que nunca se los envió. El comprador había adelantado la mitad del precio acordado y desde ese día no había recibido noticias del vendedor, quien incluso le había bloqueado los números de teléfono para evitar dar explicaciones sobre la venta.

Fruto de la investigación, se comprobó que la empresa había cesado su actividad comercial en agosto del 2016 y que cuando se produjo la operación de compraventa,

la actividad empresarial era nula y su sede estaba cerrada y abandonada. Por estos hechos, los agentes del Grupo de Delitos Económicos de la Comisaría de Gijón detuvieron por un supuesto delito de estafa al ex gerente de la empresa vendedora.